Origen del árbol de navidad

El árbol navideño es un adorno emblemático de la celebración de la Navidad. Generalmente, se utiliza una conífera de hoja perenne, siendo los abetos y pinos las especies más comunes. En los últimos años, se ha popularizado el uso de árboles artificiales fabricados con plástico y otros materiales sintéticos. Estos árboles se adornan con una variedad de elementos decorativos como bolas de colores, luces, estrellas, campanas, lazos, espumillones y guirnaldas, entre otros.

Introducción

La Navidad está llena de tradiciones, y una de las más prominentes es la decoración del árbol. Ya sea un árbol natural, en maceta o uno artificial, este símbolo festivo, adornado con luces, esferas, estrellas y cintas resplandecientes, ocupa un lugar central en muchos hogares durante las festividades de diciembre. Pero, ¿cuál es el origen de esta costumbre?

Cuando los primeros cristianos llegaron al norte de Europa, encontraron que los habitantes de esa región celebraban el nacimiento de Frey, el dios del Sol y la fertilidad, decorando un árbol de hoja caduca alrededor de la fecha que ahora coincide con la Navidad cristiana. Este árbol representaba a Yggdrasil, el árbol del Universo en la mitología nórdica, cuya copa albergaba Asgard (la morada de los dioses) y el Valhalla (el palacio de Odín), mientras que sus raíces más profundas se extendían hasta Helheim (el reino de los muertos). Con la cristianización de estos pueblos, los nuevos conversos adoptaron la costumbre del árbol, dándole un nuevo significado para celebrar el nacimiento de Cristo.

Se dice que San Bonifacio (680-754), evangelizador de Alemania, derribó un árbol que representaba a Yggdrasil (o posiblemente un árbol dedicado a Thor) y en su lugar plantó un pino, que por ser perenne, simbolizaba el amor eterno de Dios. Adornó este pino con manzanas y velas; las manzanas representaban el pecado original y las tentaciones, mientras que las velas simbolizaban la luz de Cristo como luz del mundo. Con el tiempo, estas manzanas y velas fueron reemplazadas por esferas, luces y otros adornos.

Además, se añadió la tradición de colocar regalos para los niños bajo el árbol, traídos por figuras como San Nicolás, también conocido como Santa Claus o Papá Noel, o los Reyes Magos, dependiendo de las tradiciones de la región.

Europa, ¿la cuna del árbol de Navidad?

Según el artículo, desde tiempos antiguos, los árboles de hoja perenne han sido un elemento decorativo clave en las celebraciones paganas del solsticio de invierno, simbolizando la victoria de la vida y la luz sobre la muerte y la oscuridad.

Sin embargo, no hay un consenso claro sobre cuándo y dónde estas tradiciones paganas se difundieron globalmente. Lo que sí se sabe es que los orígenes del árbol de Navidad moderno están vinculados a regiones con abundantes bosques, especialmente en el norte de Europa.

Específicamente, Letonia y Estonia reclaman ser los lugares donde se colocó el primer árbol de Navidad. En Letonia, la tradición se remonta a 1510, cuando un gremio de comerciantes llamado House of the Black Heads (Casa de las Cabezas Negras) llevó un árbol por la ciudad, lo decoró y luego lo quemó. Estonia, por su parte, sostiene que hay evidencia de un evento similar organizado por el mismo gremio en Tallin, su capital, en 1441.

A pesar de estas afirmaciones, los historiadores cuestionan su veracidad, especialmente la idea de que estas celebraciones estuvieran relacionadas con las festividades de diciembre.

Elementos decorativos del árbol de Navidad

La tradición de decorar el árbol de Navidad parece haber comenzado en Alemania y Escandinavia durante los siglos XVI y XVII, y luego se extendió a otros países europeos. Hoy en día, se utilizan una gran variedad de objetos y elementos para su ornamentación, siendo los más tradicionales:

• Estrella: Normalmente colocada en la punta del árbol, simboliza la fe que guía la vida de los cristianos, recordando la estrella de Belén.
• Esferas: Originalmente, San Bonifacio decoró el árbol con manzanas, representando las tentaciones. En la actualidad, se utilizan bolas o esferas, también conocidas como bambalinas o chirimbolos en algunas regiones, que simbolizan los dones de Dios a la humanidad.
• Lazos: Se cree que representan la unión de las familias y seres queridos, simbolizando los lazos que unen a las personas en el intercambio de regalos y buenos deseos.
• Luces: Inicialmente velas, las luces representan la luz de Cristo.

Significado religioso

El árbol de Navidad tiene múltiples significados simbólicos. Se le relaciona con el árbol del Paraíso, del cual comieron Adán y Eva, marcando el inicio del pecado original; este acto resalta la necesidad de Jesucristo como el Mesías prometido para la redención y reconciliación de la humanidad. Además, el árbol de Navidad también simboliza el árbol de la Vida, o la vida eterna, por su carácter perenne. Asimismo, representa el brote del Árbol de Jesé, del cual Jesús es considerado el cumplimiento de las profecías.

La forma triangular del árbol, comúnmente una conífera como el abeto, se asocia con la Santísima Trinidad. Durante el Adviento, se realizan oraciones con colores específicos, cada uno con un significado particular:

• Azul: Para las oraciones de reconciliación.
• Plata: Para las oraciones de agradecimiento.
• Oro: Para las oraciones de alabanza.
• Verde: Para las oraciones relacionadas con la abundancia, la fortaleza y la naturaleza.

Los orígenes del árbol de Navidad en Alemania

El origen del árbol de Navidad puede remontarse a Alemania. Según la Enciclopedia Britannica, alrededor del año 723, el misionero inglés San Bonifacio se encontró con paganos alemanes que estaban a punto de realizar un sacrificio en un roble dedicado al dios Thor. Bonifacio cortó el árbol con un hacha y, al no ser castigado por su dios, proclamó que una planta de hoja perenne cercana sería su "árbol sagrado". Desde entonces, los árboles de hoja perenne comenzaron a integrarse en los ritos cristianos en Alemania. Durante la Edad Media, se crearon "árboles del paraíso" para representar el Jardín del Edén, decorados con manzanas y exhibidos en las casas el 24 de diciembre, durante la festividad de Adán y Eva.

En el siglo XVI, Martín Lutero fue el primero en colgar velas encendidas en un árbol, lo que marcó una evolución de los árboles del paraíso a los árboles de Navidad, estableciendo una tradición en Alemania. La popularidad del árbol de Navidad se extendió a otros países, especialmente a Inglaterra, donde el príncipe Alberto (de origen alemán) y la reina Victoria popularizaron la tradición. En 1848, la revista Illustrated London News publicó una ilustración de la familia real alrededor de un árbol de Navidad decorado, lo que impulsó su popularidad entre los británicos.

Con el tiempo, los colonos llevaron la tradición del árbol de Navidad a Estados Unidos. Aunque inicialmente la costumbre fue rechazada debido a sus raíces paganas, ganó aceptación y popularidad, especialmente a finales del siglo XIX, expandiéndose a diferentes partes del mundo.