Isla Santa Elena un paraíso caribeño en Roatán

Santa Elena​ es una isla situada en el municipio de José Santos Guardiola, dentro del departamento de Islas de la Bahía, en el Mar Caribe, al norte de Honduras. Esta isla se encuentra al oeste de Barbareta, Morat, Guanaja y los cayos Indios, y al este de Roatán, directamente al norte de Roca Diamante. En su territorio se incluyen la Bahía Bailey al sur y la Bahía Campo al norte.

 

Introducción

Santa Elena es un rincón pequeño y encantador que limita con el municipio de Roatán, en Islas de la Bahía. Su localización es confusa para muchos, ya que, aunque se conoce su existencia, es algo complicado encontrarla en los mapas debido a su particular división geográfica.

Lo interesante de la Isla Santa Elena es el proceso de llegar a ella, que se puede realizar desde la isla de Roatán mediante una travesía marítima a través de un estrecho canal que separa ambas islas. En el trayecto, se pueden observar los manglares únicos de la región.

Entre las maravillas que ofrece la isla se encuentran sus hermosas playas de arena blanca, cuevas con historia antigua y una comunidad sumamente acogedora y cálida que le recibirá con gran entusiasmo.

Descripción turística

La isla también alberga Big French Key, un cayo privado donde se puede practicar el buceo y disfrutar de eventos que celebran la cultura hondureña, como los bailes tradicionales garífunas.

Roatán es verdaderamente impresionante, con sus aguas turquesas que reflejan la pureza de sus playas. En Santa Elena, el mar es igualmente deslumbrante. Todo el entorno enamora, desde los vibrantes corales y las aguas cristalinas hasta la brisa fresca y, especialmente, la calidez de su gente, creando un refugio único en un mundo cada vez más deteriorado.

Roatán juega un papel crucial en la economía del país, atrayendo numerosos cruceros internacionales y generando un significativo flujo de capital en la región insular. Su atractivo turístico hace de esta isla un destino muy codiciado. Santa Elena, en cambio, es menos conocida; probablemente la descubren quienes tienen un profundo amor por la naturaleza pura o buscan aventuras únicas. En el último año, la paradisíaca Roatán ocupó el puesto 15 en los premios Travellers’ Choice 2017 de TripAdvisor. En Centroamérica, solo Roatán y Belice figuran entre los destinos más altamente calificados por los turistas.

Además, en 2016, la playa West Bay de Roatán fue reconocida por TripAdvisor como la mejor de Centroamérica y una de las 25 mejores playas del mundo. Así, año tras año, Honduras sigue ganando reconocimiento como un destino turístico de primer nivel que atrae a miles de viajeros.

Un poco de Historia

En Santa Elena, hay aproximadamente 250 viviendas, con un promedio de seis personas residiendo en cada una, viviendo en condiciones distintas a las de otras áreas de Islas de la Bahía. Esta isla forma parte del municipio de José Santos Guardiola, donde residen alrededor de 1,500 isleños distribuidos en comunidades como Bentley Bay, El Bight, La Punta, Sico y Mangrove Bight.

La zona carece de alumbrado eléctrico, y algunos residentes dependen de generadores solares propios, lo cual resulta costoso para las economías modestas de los habitantes, en su mayoría pescadores y marineros.

Recientemente, la Roatán Electric Company (RECO) anunció un proyecto para llevar energía eléctrica a la zona, actualmente en su fase inicial. Dewi Cacho, gerente de distribución de RECO, detalló que la inversión en la instalación asciende a unos siete millones de lempiras. Cacho espera que, con la llegada del servicio eléctrico, se atraigan inversiones de negocios, agencias bancarias y otros.

El Watsin Boden, un residente de 60 años, expresó que contar con electricidad ha sido un anhelo durante décadas. Boden mencionó que hay varios extranjeros que poseen propiedades en la isla y están interesados en invertir, esperando que la economía local mejore pronto.

Actividad económica

En Santa Elena, la economía local depende principalmente de la pesca y de los ingresos que retornan con los residentes que trabajan en barcos. El dinero llega a la isla cuando los familiares de los pescadores regresan, generalmente una vez al año. Este dinero debe ser administrado con cuidado durante la ausencia de sus seres queridos que laboran en alta mar.

Las calles de Santa Elena están en mal estado y las oportunidades para conducir vehículos son prácticamente inexistentes. Las playas, a pesar de su belleza natural, muestran signos de descuido. Este entorno limita las posibilidades de crecimiento económico para los habitantes. Sin embargo, el lugar sigue siendo impresionante. La naturaleza ha sido generosa con esta isla hondureña, donde las casas de madera, muchas de las cuales reflejan la pobreza de sus residentes, contrastan con la belleza natural del entorno.

Actualmente, el gobierno está promoviendo la industria turística en Roatán a través de la Ley de Fomento al Turismo, con el objetivo de aprovechar las ventajas naturales y convertir a la región en un eje clave del desarrollo de Honduras.

Esta situación resalta la necesidad de incluir a Santa Elena en los programas de desarrollo. Este pequeño rincón de Honduras tiene el potencial de convertirse en un destino turístico excepcional si recibe la atención adecuada, sin dejar de estar bajo la protección de Dios, que ha dotado a la comunidad con una belleza natural inigualable.