Catedral de San Pedro Apóstol (San Pedro Sula)
La catedral de San Pedro Apóstol, consagrada al venerado patrón homónimo, quien ostenta este título en la diócesis, la parroquia y la ciudad, constituye un emblema impregnado de historia en San Pedro Sula.
Indice de Contenido
Introducción
En 1947, dieron comienzo los trabajos de construcción de la catedral, la cual fue concebida por el arquitecto costarricense José Francisco Zalazar. La ejecución de la obra estuvo a cargo del ingeniero hondureño Amilcar Gómez Rovelo, mientras que la supervisión directa en el sitio fue responsabilidad del maestro de obra Pablo Barahona.
La catedral de San Pedro Apóstol no solo representa la fe y devoción arraigadas en la comunidad católica de San Pedro Sula, sino que también se erige como un símbolo identitario fundamental para la ciudad.
Desde su erigimiento, ha sido un testigo fiel de las diversas experiencias de alegría y tristeza, de las luchas y compromisos de un pueblo que anhela alcanzar una calidad de vida mejor. Los treinta y ocho años dedicados a su construcción encapsulan la historia de innumerables sampedranos que contribuyeron de manera significativa a su edificación.
Historia
La Villa de San Pedro de Puerto Caballos, fundada por el adelantado don Pedro de Alvarado el 27 de junio de 1536, contaba inicialmente, a mediados del siglo XIX, con una modesta ermita destinada a las ceremonias del rito católico, dedicada a la Virgen del Rosario. En 1899, se consideró la necesidad de construir un edificio más espacioso que reemplazara a la ermita. La ejecución de esta idea comenzó en 1904, dando lugar a una nueva iglesia con paredes de bahareque, techo de artesón de madera y tejas.
El 2 de febrero de 1916, mediante la Bula "Quae Rei Sacre", el pontífice Benedicto XV fundó la Arquidiócesis de Tegucigalpa con jurisdicción sobre las nuevas diócesis, incluida la de San Pedro Sula, establecida como Vicariato apostólico. Dado el crecimiento, la iglesia existente se consideró insuficiente, llevando a la solicitud de una catedral más amplia. Bajo el liderazgo del párroco, el cura Rafael Oseguera, se formó una organización en 1936 a favor de la construcción de la Catedral de San Pedro Apóstol.
En 1947, se iniciaron los trabajos para la nueva catedral, diseñada por el arquitecto costarricense José Francisco Zalazar. El ingeniero a cargo fue el hondureño Amilcar Gómez Rovelo, y el maestro de obra fue Pablo Barahona. Después de varios años de labor, el 27 de septiembre de 1970, la obra fue entregada al Obispo de la Diócesis, Jaime Brufau Maciá.
A partir de 2017, el sacerdote Glenis Geovany Mejía Ortíz asumió como Cura Párroco de la catedral, sucediendo al sacerdote José Antonio Canales, quien fue designado Obispo de la Diócesis de Danlí en el Departamento de El Paraíso. El 26 de enero de 2023, el papa Francisco elevó la Diócesis de San Pedro Sula a arquidiócesis metropolitana, creando la Provincia Eclesiástica de San Pedro Sula, y otorgando a la catedral el estatus de sede metropolitana.
Descripción
La Catedral Metropolitana San Pedro Apóstol se ubica frente al Parque Central General Luis Alonso Barahona en la ciudad de San Pedro Sula, en la Tercera Avenida del Barrio El Centro. Su estructura adopta la forma de una cruz latina, con bóvedas que sostienen una cúpula central, decorada con pinturas representando a los 12 apóstoles.
La fachada está complementada por dos torres campanarios a ambos lados. La puerta principal, orientada al oeste, se ve acompañada por dos puertas adicionales en las orientaciones norte y sur, permitiendo el acceso a la feligresía católica. El altar principal, incrustado con su respectivo retablo, ocupa una de las aristas del edificio. Amplios ventanales con figuras cristianas decoran las paredes principales de la nave en cruz, permitiendo que la luz natural ilumine el interior de la catedral.
Las dimensiones de la catedral son notables: 66 metros por 38 metros, con una altura aproximada de 35 metros, colocándola como el segundo templo católico más grande del país. Al ingresar al templo, los visitantes, tanto nacionales como extranjeros, se ven envueltos en un ambiente de calma y arte, convirtiendo este lugar en una parada obligatoria.
La catedral, construida con esfuerzo a lo largo de muchos años, es el resultado del trabajo dedicado de hombres y mujeres que contribuyeron para hacer realidad este proyecto. El libro 'Hombres y apóstoles en la costa norte hondureña' detalla los acontecimientos relacionados con la construcción de la catedral, revelando las vicisitudes y las personas clave que aportaron sus recursos y tiempo para la edificación de esta parroquia.