Inversión – Concepto y Tipos de Inversión
La inversión consiste en la asignación de recursos monetarios con el fin de fomentar el aumento de la riqueza en el futuro y facilitar el desarrollo de la producción. La realización de la inversión está condicionada por el agente económico que la lleva a cabo, ya que no se limita exclusivamente a la inversión en efectivo, sino que también se puede invertir en materias primas, transportes, industrias, entre otros.
Indice de Contenido
Introducción
En términos individuales o familiares, la inversión se puede simplificar a la adquisición de activos financieros como acciones o bonos, y a la compra de bienes duraderos como una casa o un coche. A pesar de esto, desde una perspectiva de economía nacional (sin incluir transacciones internacionales), estos bienes no se consideran como inversión.
Inicialmente, el incremento de los activos financieros en manos de los ciudadanos de un país no se traduce en un aumento absoluto de la riqueza del Estado, dado que estos activos constituyen pasivos de otros individuos del mismo país. La transacción de estos activos implica un traslado de propiedad de los activos preexistentes o del producto que se generan.
De manera similar, la adquisición de bienes de capital de segunda mano no se considera una inversión adicional en la economía nacional. Esto se debe a que la transacción de compra y venta de estos bienes no supone una creación neta de ingresos, ya que implica solamente un cambio de propiedad de activos preexistentes cuya producción fue registrada en el año en que se fabricaron.
De acuerdo a las normas de contabilidad nacional que son adoptadas por la mayoría de los países, las adquisiciones de bienes de consumo duraderos, como los electrodomésticos y los automóviles, realizadas por las economías domésticas, no son consideradas como inversión, sino que se incluyen dentro de la categoría de consumo privado. Esta clasificación se debe a las convenciones contables aceptadas y a motivos de conveniencia estadística, puesto que se asume que estas transacciones no contribuyen a aumentar el producto nacional. En la misma línea, la compra de vehículos por parte del gobierno tampoco se considera como inversión en el país.
Desde la perspectiva de la economía nacional, la inversión o formación bruta de capital en términos de contabilidad nacional implica una expansión del stock de capital real en el país, especialmente en el ámbito productivo, como las instalaciones industriales, la maquinaria o los medios de transporte, entre otros. Asimismo, también se contribuye al aumento del capital humano, como el personal capacitado y especializado.
Cuando se excluye la variación de los inventarios en la contabilidad, nos referimos a la formación bruta de capital fijo, mientras que si se toma en cuenta la depreciación o el desgaste del capital, se habla de formación neta de capital. Por lo tanto, aunque la adquisición de un automóvil por parte de un individuo no se considera como inversión nacional, la compra de vehículos por parte de una empresa sí se considera inversión, ya que se utilizará para ampliar el capital productivo de la comunidad.
Hay una excepción crucial: la adquisición de viviendas nuevas se considera formación bruta de capital, aunque su uso no contribuya al aumento del producto nacional. Dado que el capital nacional abarca también el capital humano, se puede argumentar que invertir en este capital debería ser considerado como inversión. Por lo tanto, los gastos en educación deberían ser contabilizados como parte de la inversión, y no como consumo (ya sea privado o público).
Factores que determinan la Inversión
La determinación de los factores que influyen en el nivel de inversión es uno de los temas más controvertidos en economía, y existen diversos enfoques al respecto. Por un lado, la teoría del acelerador establece una relación entre el nivel de inversión anual y los cambios requeridos en la estructura del capital de una economía debido a los cambios en la producción. Esta teoría, junto con otros supuestos, es de gran relevancia para ciertas teorías acerca de los ciclos económicos.
Una teoría alternativa, la "teoría neoclásica de inversión", se enfoca en el análisis del equilibrio del stock de capital en función de variables como la actividad económica, los precios de los productos finales, los costos de los bienes de capital y el costo de oportunidad del capital (determinado por la tasa de interés que se podría haber obtenido invirtiendo el mismo dinero en activos financieros).
El nivel de inversión se basa en el objetivo de reducir la brecha entre el stock de capital actual y el deseado, dados unos valores constantes de las variables que definen este último. Se ha tratado de establecer las relaciones entre estas variables y la función de producción de la economía, pero las dificultades son considerables, en parte porque las estimaciones del stock de capital no son del todo precisas y porque la inversión en un periodo determinado (como un año) refleja el intento de alcanzar el nivel de capital deseado.
La complejidad en la interpretación de las variaciones pasadas en el nivel de inversión y las variables que lo determinan se debe a que estas últimas cambian de forma constante, y la inversión puede llevarse a cabo durante varios años.
Existen otras teorías que destacan la relevancia de las expectativas empresariales y la incertidumbre que conlleva cualquier inversión, así como de las necesidades de liquidez de las empresas. Todas estas teorías no son mutuamente excluyentes; ya que las empresas modifican su ritmo e inversión, así como la cantidad invertida, el estudio de los determinantes de la inversión depende del momento y de las circunstancias en las que se realiza.
Tipos de inversión
Existen múltiples formas de clasificar las inversiones, cada una de ellas aportando una perspectiva diferente y ninguna de ellas siendo necesariamente superior a las demás. Dependiendo del contexto en el que se utilice, una u otra clasificación puede ser más adecuada y útil.
Según el horizonte temporal:
- Corto plazo: Menos de 1 año.
- Medio plazo: Entre 1 y 3 años.
- Largo plazo: Más de tres años.
Según el elemento en qué se invierta:
- Maquinaria: Tractores, robots, empaquetadoras…
- Materias primas: Metales, alimentos, combustible…
- Elementos de transporte: Furgonetas, camiones, coches…
- Edificios: Naves industriales, oficinas, bajos comerciales…
- Inversión en participaciones de otras empresas
- Inversión en investigación y desarrollo (I+D).
Según el ámbito:
- Empresarial.
- Personal.
- Financiera.
Según la naturaleza del sujeto:
- Privada.
- Pública.
Según la adaptación al destinatario:
- Personalista o a medida.
- Generalista o estándar.
Podemos concluir que la inversión se define como el gasto destinado a incrementar la producción, en contraposición al consumo. En otras palabras, la inversión consiste en no utilizar los recursos disponibles en el presente para satisfacer las necesidades inmediatas, sino en emplearlos para satisfacerlas en el futuro. Por consiguiente, la inversión está íntimamente ligada al ahorro, que es la renuncia al consumo actual en beneficio del futuro.